Taxista pone la polla a un cliente español con grandes tetas

Cada vez pensamos más que la profesión de taxista es una excelente manera de obtener chochitos para conducir el gallo. Este cliente español necesita un taxi y llama a uno para llevarla al aeropuerto. Pero la cosa se le escapa a la madre y el taxista le pone la polla casi sin pensar, dejándola bien penetrada en varias posiciones mientras vemos que sus tetazas se mueven sin parar. Seguramente va a perder el avión, pero lo que toma a cambio es uno de esos polvos que la pequeña zorra siempre recordará, porque seguramente no había sido follado así durante mucho tiempo.