Joven en medias recibe corrida en la cara

Es la hora del descanso y todos los empleados se han ido a almorzar. por tanto, la secretaria se permite colarse en el despacho de su jefe para disfrutar de un pequeño recreo sexual. el hombre sentado en uno de los sillones lee una revista que termina dejando cuando la joven se acerca. ambos se besan tiernamente y la traviesa se coloca sobre las rodillas de su jefe. este último expone con delicadeza sus pechos, que acaricia, le hace cosquillas y amasa mientras le pellizca los pezones. la pelirroja, con la cabeza echada hacia atrás, se complace mientras gime disfrutando de cada uno de estos toques íntimos.